lunes, 4 de mayo de 2009

Recibiendo señales de humo del amor platónico.

Puede que sea eso lo que me haga tan salvaje. Tenerlo siempre presente.
Quizá sea eso lo que hace que nadie tenga importancia,
que a nadie le dedique más tiempo, que sólo los quiera,
o más bien los necesite, para mi lado sexual.

En el fondo siempre está él con sus manos inseguras y temblorosas.
Sus ojos esquivos y su sonrisa nerviosa.

Me encantaría recogerle los acordes que tiró y devolvérserlos en forma de besos.
Poder cogerle las manos y posarlas en mi cara, en mi cuello, en mi vientre, y dejarlas reposar allí, hasta que se calmaran. Abrazarlo. Sentir su piel suave y fina.
Quedarme inmóvil sintiendo su respiración.
Poder prometerle que siempre he estado y estaré aquí, en algún lugar, para que llegado el momento podamos volver a encontrarnos por última vez.





1 comentario:

  1. Tu décris le moment parfait.

    Les paroles de cette chanson sont précieuses et précises.

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